Se desarrolló este viernes, en la Unidad Fiscal de La Paz, la indagatoria al vocal del Superior Tribunal de Justicia (STJ), Emilio Castrillón –jubilado desde hace pocas horas de ese cargo- por los hechos violentos ocurridos en un kiosco de dicha ciudad en la madrugada del domingo 28 de marzo. A las 9.30 fue la indagatoria ante el fiscal Oscar Sobko en la causa por daños y amenazas a raíz de los incidentes en el local comercial, y a las 10.30 prestó indagatoria en el marco de la causa por amenazas coactivas, que habría efectuado contra el padre del fiscal Facundo Barboza.
En la oportunidad, según supo ANALISIS, Castrillón negó los hechos de los cuales se le acusa y aseveró que los propietarios del comercio habrían cambiado la escena de la pelea antes de la llegada del personal policial de Criminalística que intervino tras la denuncia.
Vale recordar que el magistrado había solicitado que la indagatoria se efectuara ante la Procuración General y no ante los fiscales interinos Facundo Barbosa y Candela Bessa, lo cual le fue denegado.
La denuncia
Dos comerciantes y un empleado de un kiosco de La Paz, ciudad ubicada a 165 kilómetros de Paraná, denunciaron por daños y amenazas al ex presidente y actual vocal del Superior Tribunal de Justicia de Entre Ríos, quien la madrugada del domingo 28 de marzo protagonizó un escándalo en el comercio de calle Sáenz Peña y Belgrano, lindero a su casa.
Días después de la polémica, el magistrado hizo saber su versión de los hechos en el programa A Quien Corresponda de Radio De la Plaza: dijo que cerca de las 2 solicitó al dueño del comercio que baje el sonido de la música y que, ante la negativa, la discusión subió de tono y terminó siendo golpeado por cuatro personas. Además, aseguró que en el lugar había cerca de 300 personas que no cumplían los protocolos sanitarios por la pandemia.
En el acta de denuncia se dejó asentado que este último presentaba hematoma de un centímetro en antebrazo derecho y una excoriación de 0,5 centímetro en el dorso de la mano izquierda.
Mariano Lukacs refirió en sede policial que alrededor de la 1.44, cuando se encontraba trabajando en el maxikiosco “El Kioscaso”, del cual es dueño, “se hizo presente el señor Emilio Castrillón y sin dar motivo empezó a voltear las góndolas del negocio, tirándole una botella de cerveza al empleado que se encontraba atendiendo”.
Además, aseguró que al vocal “lo sacaron a la fuerza” y que “en el exterior comenzó a amenazar con quedarse con toda la esquina la cual es propiedad de la familia y amenazando en prender fuego la esquina”. “Lo llevé a los empujones hasta la casa, la cual está a 20 metros, hasta que llegó la policía. También me amenazó diciendo ‘hagan la denuncia, total yo soy el dueño de la ciudad’”, agregó.
Por su parte, Chamarro, empleado del kiosco, sostuvo que Castrillón lo insultó y “arrojó las góndolas al piso, las botellas y pateó las heladeras”. “Cuando intentó tirar las demás góndolas lo retiré del interior a la fuerza para evitar más destrucción y evitar lesiones de dos menores que se encontraban en el interior del establecimiento”, afirmó.
A su tiempo, Natalia Lukacs contó que se encontraba junto a una amiga cuando vio cómo Chamarrro retiró a Castrillón del interior del local “porque había roto todo”. “Sale y me pega una piña en el costado derecho, sin haberle hecho nada”, dijo.
Asimismo, señaló que “la situación de agresión continúa para todos los que se encontraban en el lugar” y que “también se sumó la mujer de él, Natalia Céparo, quien tiraba piedras e insultaba a todos los presentes”.
Sobre la intervención de la esposa del vocal, sostuvo que “tiene presente que hace un año aproximadamente los amenazó que iba a prender fuego al kiosco por motivo de la música alta”. Por último, sugirió que la esposa del vocal sufriría violencia de género por parte del magistrado.
Fuente: Analisis Digital